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Cuando hablamos de la NCAA estamos dando por sentado que serán torneos de prestigio en donde la organización de los diferentes eventos deportivos tendrá una cifra ínfima de irregularidades y errores. Son el ente que maneja las diferentes competiciones universitarias en Estados Unidos y manejan muchos recursos. Estos estándares de calidad, en teoría, deberían potenciarse si estamos hablado de instancias de definiciones en donde es mucha más la masa de personas que estarán al pendiente de los diferentes partidos. Bueno, en el baloncesto femenino de la NCAA se les pasó un error grande como una casa.

NC State enfrentaba a Texas en un partido correspondiente al Elite Eight del March Madness de la NCAA en el Moda Center, casa de Portland Trail Blazers. Al comenzar la transmisión puede distinguirse un error enorme a simple vista. Ustedes podrán pensar en las fallas relativamente habituales que puede tener un juego de baloncesto, que los relojes o marcadores no anden de la mejor manera o que alguna de las redes presente una ruptura, lo cierto es que acá el problema fue un poco más grave. El percance fue que las líneas de tres estaban a distancias diferentes. 

“Los dos entrenadores en jefe fueron conscientes de la discrepancia y eligieron jugar el partido completo en la cancha tal como está, en lugar de corregir la cancha y retrasar el juego”, dijo la NCAA en un comunicado. Según la transmisión de ABC, la NCAA notificó al entrenador de NC State, Wes Moore, y al entrenador de Texas, Vic Schaefer, sobre el prolema antes del encuentro. Moore y Schaefer salieron a la cancha durante la práctica de tiro previa al juego para ver el error, midieron en pasos la distancia desde la línea de tiros libres hasta la parte superior del arco.

El encuentro finalmente terminó con victoria de NC State por 76 a 66. El conjunto vencedor avanzó a la Final Four.